CONOCE A LOS PASTORES
Yves Malcotte es el pastor principal de la Iglesia Palabra de Fe, desde que se fundó en 2008, y ha estado en el ministerio por más de 20 años. Prosigue a la meta de edificar las vidas de las personas para que cumplan el propósito por el cual fueron creados. Su versículo favorito es Marcos 11:23 echado al mar toda montaña que se imponga en el camino, con la finalidad de que los congregantes de su iglesia vivan de manera práctica la victoria espiritual, física, emocional y financiera.
Sus mensajes son siempre estrictamente basados en la Biblia, con celo de pararse firme en la verdad absoluta. Ministra con una fuerte unción de sanidad.
El pastor Yves Malcotte, y su esposa Yolanda han experimentado personalmente el poder del mensaje de fe que cambia vidas. Ellos empezaron – como muchos de nosotros – luchando con carencias, deudas, enfermedad y desanimo. Pero decidieron creer y confiar en Dios, basando sus vidas sobre la Palabra.
Ahora dan testimonio de las bendiciones – de gozo, paz, libertad, sanidad y amor – en sus vidas y quieren ver otras vidas cambiadas también.
I. VISIÓN
Hacer discípulos, bautizarlos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñarles a que guarden la Palabra de Dios, sanar a los quebrantados de corazón, pregonar libertad a los cautivos y vista a los ciegos; para ser fortalecidos en poder por el Espíritu Santo de Dios, para los últimos tiempos.
Mt. 28:19, Lc.4:18, Ef.6.16
II. MISIÓN
Edificando a hombres y mujeres de Dios a través de la Escritura que es útil para enseñar, redargüir, instruir y corregir, a fin de que sean perfectos, enteramente preparados para toda buena obra. Ayudándolos a cumplir el propósito por el cual fueron creados.
1 Co. 3:9 y 2 Ti. 3:16
Slogan
Ayudando a las personas a cumplir el propósito por el cual fueron creadas.
Las Escrituras.- La Biblia es la Palabra de Dios (2 Tim. 3:16; 2 P. 1:21; 1Ts. 2:13).
La Trinidad.- Nuestro Dios es uno, manifestado en tres personas Padre, Hijo y Espíritu Santo (Dt. 6:4).
El Hombre, su caída y su redención.- El hombre es un ser creado, hecho a la semejanza de Dios, pero por la transgresión de Adán y su caída, el pecado vino al mundo (Ro. 3:10, 23).
La vida eterna y el nuevo nacimiento.- El nuevo nacimiento es necesario para todos los hombres (2 Co. 7:1; 1 Jn. 5:12; Jn. 3:3-5).
El bautismo en agua.- El bautismo en agua es por inmersión. Es un mandato directo de nuestro Señor y es sólo para creyentes (Mt. 28:19; Ro. 6:4, 8:36-39).
El bautismo en el Espíritu Santo.- El bautismo en el Espíritu Santo y fuego es para todos los creyentes de esta dispensación y se recibe subsecuentemente al nuevo nacimiento. Esta experiencia es acompañada por la evidencia de hablar en otras lenguas (Mt. 3:11; Jn. 14:16,17; Hch. 1:8; 2:38, 39; 19:1-7; 2:1-4).
La santificación.- La Biblia enseña que ningún hombre sin santidad puede ver al Señor (He.12:14; 1 Ts. 5:3; 2 P. 3:18; 2 Co. 3:18; Fil. 3:12-14; 1Co. 1:30).
La sanidad divina.- La sanidad es para las enfermedades físicas del cuerpo humano y es dada por el poder de Dios por medio de la oración de fe y de la imposición de manos (Mr. 16:18, Stg.5:14,15; 1 P. 2: 24).
La resurrección del justo y el retorno de nuestro Señor.- Los muertos en Cristo resucitarán primero, luego nosotros los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire (Hch. 1:11; 1 Ts. 4:16,17).
El infierno y la retribución eterna.- El que muere físicamente en su pecados sin aceptar a Cristo esta sin esperanza destinado a ir al lago de fuego (He. 9:27; Ap. 19:20).